LOS ORÍGENES DEL BARRIO DE SAN ANDRÉS, UN BARRIO OBRERO EN LA PEÑA DE LOS LAGARTOS (otro ensanche hervasense surgido a finales del siglo XIX)
Copyright@2025Pedro Emilio López Calvelo
Abordaremos en esta entrada un tema que, de alguna manera, ya insinuamos en alguna entrada anterior, al tratar el tema del origen de la estación de ferrocarril en Hervás (aunque de forma un tanto "tangencial"): el origen del barrio de San Andrés.
También, hace pocas entradas, en octubre del pasado 2024, tratamos sobre el ensanche urbano proyectado del casco urbano de Hervás en 1880 -a partir de la calle Tenerías (hoy Gabriel y Galán)-, diseñado como consecuencia del desarrollo de la Feria de Ganados que tenía lugar en el municipio desde pocos años antes. Explicamos entonces que en las últimas décadas del siglo XIX Hervás experimentó, como consecuencia del desarrollo que había tenido la industria textil en la segunda mitad del siglo, un notable aumento demográfico, acercando su población a los 5000 habitantes.
El nacimiento del barrio de San Andrés, en el sitio conocido como la Peña de los Lagartos, se produjo, por tanto, a finales del siglo XIX. La primera noticia que tenemos de intenciones de "urbanizar" este sitio se refieren a que allí se pretendió, inicialmente, colocar la estación de ferrocarril de Hervás que se estaba construyendo por aquel entonces. Desde los primeros momentos en que se diseñó el trazado de la línea de ferrocarril por el término municipal de Hervás se pensó en la Peña de los Lagartos como el lugar donde iría colocada la estación. Ya un acta de pleno municipal de 1883 lo manifestó así cuando se habla de las condiciones que ofrecería el Ayuntamiento a la compañía constructora de la vía de ferrocarril: "[...] y cederá gratuitamente la faja o cinta que expresada vía coja del término municipal, siempre que quede Estación en el sitio que se dice hoy designado por los ingenieros, o sea Peña de los Lagartos, y de no ser ésta posible, que ha de quedar todo lo más distante un kilómetro de la población [...]" ¹.
El acta de la sesión extraordinaria del pleno de Ayuntamiento de Hervás de 8 de abril de 1889 está ratificando el ofrecimiento del Ayuntamiento a la Compañía concesionaria del ferrocarril, y en ella se indica también que "[...] la estación se halla de emplazar en la Peña de los Lagartos o sitio próximo a la misma en que sea posible, no quedando nunca a más de un kilómetro del pueblo y a que el trazado no sufra dentro del término municipal de Hervás ninguna variación de como figura en el estudio o plano que sirvió de base a la subasta de la línea [...]" ².
Sin embargo, de todos es conocido que la estación de Hervás se construyó, definitivamente, en el sitio de La Cerecilla, que hubo que acondicionar para ubicar dicho conjunto de edificios. Ya indicamos que no hemos encontrado un documento escrito que indique o explique esta cambio de ubicación, cambio que debió decidirse, probablemente, a lo largo del año 1889. En noviembre de 1890 el Ayuntamiento está estudiando los planos de los dos caminos que, desde el Robledo y la calleja de los Esquiñones (hoy Avenida de Piñuela y Paseo de la Estación) llegarían a la estación desde el casco urbano; esto confirma que, de forma definitiva, estaba abandonada la primitiva intención de ubicar la estación de ferrocarril en la Peña de los Lagartos.
Creemos que una de las posibles razones de este cambio de ubicación, quizá no la única (por ejemplo, es probable que, además, la empresa constructora encontrara dificultades técnicas para esta ubicación de la estación en la Peña de los Lagartos), esté relacionada con el ya mencionado crecimiento demográfico que estaba experimentado la población hervasense en la segunda mitad del siglo XIX como consecuencia del innegable desarrollo de su industria textil.
En el acta ordinaria de pleno de Ayuntamiento del día 16 de noviembre del mismo 1890 indica el Secretario que, a instancias del alcalde, D. Eduardo Martín Asensio, la reunión tenía por objeto hacer ver: "Primero: que en esta localidad se carece del número de casas necesarias para albergarse en ellas el número de almas que existen en la localidad, siendo esto perjudicial a la salud pública, por que se ven obligados los vecinos a vivir hasta tres y cuatro en una misma casa -recuérdese que el concepto vecino en aquellos tiempos equivalía a cabeza de familia- sin condiciones higiénicas de ninguna clase, por lo que la Ilustre corporación debe adoptar el medio que crea conveniente para evitar los males que con tal objeto pueden sobrevenir [...]" ³. Más adelante, en el mismo acta se indica que "por unanimidad acordó al primer particular que es de todo punto indudable lo manifestado por el Sr. Alcalde, razón por la que debe procederse al ensanche de la población, el que debe tener lugar en el sitio denominado Peña de los Lagartos, a cuyo efecto una comisión de ornato público debe pasar a dicho sitio y señalar el terreno que han de ocupar las casas que se construyan, y una vez que dicho terreno esté designado acordará la Ilustre corporación el número de metros que se ha de ceder para cada vivienda o casa, igualmente que las condiciones con que han de construirse y el precio de cada solar, los cuales deben benderse en pública subasta como sobrantes de la vía pública [...]" ⁴. Por lo tanto, en la mentalidad de los miembros del Consistorio de aquellos momentos, estaba la idea de realizar un ensanche urbano de la población en este sitio de la Peña de los Lagartos y este ensanche, el nacimiento del barrio de San Andrés, debemos fijarlo a partir de este acta de noviembre de 1890.
...y se dieron prisa en confirmarlo: en enero de 1891, el Alcalde de Hervás, D. Eduardo Martín Asensio, confirma que ya se han presentado solicitudes para construir sobre los espacios que ha numerado el ayuntamiento en la Peña de los Lagartos: en concreto se solicitaron un total de 19 espacios para construir viviendas; y este es el nombre de los solicitantes y, quizá, primeros ocupantes del barrio de San Andrés.
En esa misma sesión de 25 de enero se fijaron las condiciones que debía reunir las viviendas que se construyeran:
- el terreno para construir las casas sería de "10 metros cuadrados y cinco a la trasera para la construcción de un corral.
1- cimentar sobre firme
2- las paredes se harán de cal con barro con el ancho proporcional
3- el alto del piso ha de tener tres metros y medio
4- el exterior de ellos será revocado y lucido con cal
5- la puerta de entrada tendrá tres metros de altura por uno y medio de ancho
6- las ventanas uno y medio alto por uno de ancho
7- la pared del corral será, cuando menos, de uno y medio de altura
8- todas las casas llevarán la misma altura en piso y tejado para que haya uniformidad
9- el tiempo que se les concede para dar las casas concluidas es el de un año actual, y el que no las dé terminadas en este plazo perderá lo que tenga construido y el Ayuntamiento la cederá el sitio a otro vecino que se comprometa a terminarla en corto plazo que se les fijará
10- ninguno podrá oponerse a que el vecino o colindante construya sobre lo hecho, abonándole la mitad del importe del medianero.
El precio del sitio de cada casa es de dos pesetas en que ha calculado el Ayuntamiento el valor del terreno" ⁵.
Estamos, por tanto, ante el nacimiento de un barrio que podríamos calificar como de "casas baratas" -aunque no fuera esa su denominación oficial-, muy primitivo en cronología, barrios surgidos en España en el último tercio del siglo XIX y primeras décadas del siglo XX, dirigidos fundamentalmente a la clase obrera, con viviendas de una o dos plantas -una en este caso-, en los alrededores de las poblaciones -en este caso a casi 500 metros del espacio urbano consolidado-, en espacios de bajo coste y poco urbanizados y vinculada su planificación a instituciones públicas -en este caso el Ayuntamiento que se limitó a planificar el espacio pero no a gestionar su construcción-. Por otra parte, la ubicación por el ayuntamiento de una fuente en la cercana zona de El Robledo, en una época en la que se están renovando las cañerías del municipio, aseguró el abastecimiento colectivo de agua cercana a los nuevos habitantes del barrio.
No sabemos cuántas casas llegaron a construirse en este "primer impulso" de urbanización del Barrio de San Andrés, como tampoco sabemos si permanece en pie actualmente alguna vivienda -pensamos que seguramente no- de esta época.
La Revista de Ferias y Fiestas de 1952 informaba de que en 1918 se construyó el camino que comunica la Peña de los Lagartos con la Ermita del Cristo de la Salud, aprovechando el proyecto del ingeniero jefe del Distrito Forestal de Cáceres (D. Santiago Pérez) y el trazado del sobrestante de obras públicas (D. Emilio Martínez), construido por obreros de Hervás dirigidos por guardas forestales. Este camino sustituyó a uno anterior que no permitía la subida de vehículos, por lo que el material necesario para las construcción de tendidos de la plaza de toros debía ser transportado en yuntas de bueyes.
Creemos que, o no tuvo mucho éxito ese primer intento de urbanizar el sitio de la Peña de los Lagartos, o las viviendas se fueron deteriorando pronto, el caso es que unos treinta años después, en concreto en 1924, el Ayuntamiento de Hervás tomó un nuevo interés por desarrollar el ensanche de este Barrio de San Andrés. Así en el acta de plenos de Ayuntamiento del día 4 de mayo de 1924, por unanimidad, fue aprobado el pliego de condiciones formado para la cesión de parcelas de terrenos en el Barrio de San Andrés o Peña de los Lagartos para la construcción de casas para obreros.
Las condiciones aprobadas por el Ayuntamiento el día 4 de mayo de 1924 para construir "casas para obreros en el Barrio de San Andrés" fueron:
- Primera: El Ayuntamiento cede una parcela de terreno de 10 x 15 metros, con la condición de que pague el beneficiario, sus herederos o adquirientes en venta o donación, la cantidad de DOS PESETAS cada uno de los primeros veinte años a partir de la fecha de la cesión.
- Segunda: Las casas se construirán en el plazo que no excederá de año y medio; los que no hubieran terminado la casa en el plazo expresado se entiende renuncian a los beneficios concedidos, volviendo nuevamente a poder del Ayuntamiento, lo mismo que si tuviera edificado algo, sin que por ésto tenga que satisfacer el Ayuntamiento indemnización de clase alguna al beneficiario.
- Tercera: La fachada exterior se hará con verdadera uniformidad, tanto en la altura como los huecos "puertas y ventanas": la puerta entrada a la casa tendrá 2,75 metros altura por 1,75 metros de ancho; las ventanas 1,25 por 2 metros, estando su base a 0,70 cm. sobre el piso; estos tres huecos equidistarán entre sí de forma que resulte un conjunto estético.
- Cuarta: Los cimientos serán lo suficiente profundos a juicio de los peritos que en unión de la Comisión de Ornato designe este Ayuntamiento, teniendo las paredes un espesor mínimo de 75 cms. hasta el solar del terreno y de 65 cms. el resto de la pared. La altura de la pared será de tres metros.
- Quinta: Las paredes podrán construirse con piedra y barro o arcilla, pero el lucido será con cal y la correspondiente mezcla de arena.
- Sexta: La casa habitación la compondrá una nave de 10 por 8 metros y el tejado de dos vertientes. El restante terreno estará cerrado bajo muro, que servirá para corral y edificio anexo para ganados. La entrada a estas dependencias se hará siempre por una de las calles que se formarán al costado.
- Séptima: Cada cuatro casas formarán una manzana a fin de que todas ellas tengan luz directa.
- Octava: Siendo el principal fin el que se puedan construir casas de viviendas, no se consentirá el que estos edificios se destinen a otro objeto distinto ⁶.
Firma el documento el presidente de la Comisión Permanente y alcalde del momento Alejandro Cirilo Gómez Castillejo que era, además, maestro de la escuela de Hervás.
Como, con la construcción de estas promociones de viviendas y la urbanización de zonas aledañas, habían surgido nuevas calles, poco a poco se procedió a ponerles nombre. En sesión de pleno de Ayuntamiento de 28 de febrero de 1990 se puso nombre a las calles Emilio González de Hervás y Plaza de Agustín Arrojo y en la sesión de pleno de Ayuntamiento de 28 de noviembre de 1994 se puso nombre a un conjunto grande de nuevas calles, entre ellas a tres calles de este Barrio de San Andrés que, hasta ese momento, habían permanecido innominadas: son las calles Travesía de Francisco Sanz López, Calle La Luz y Calle Sol. Por último, en febrero de 2009 se nominó la calle creada en las traseras de las primeras viviendas del barrio, paralela al colegio de Enseñanza Infantil y Primaria : Calle Víctimas del Terrorismo (que, en algún momento posterior, ha sido renominada como Calle La Paz).
Para finalizar la entrada, dejaremos varias fotografías aéreas (ortoimágenes) en las que puede observarse el proceso evolutivo y constructivo de esta zona del Barrio de San Andrés desde mediados del siglo XX hasta tiempos recientes.
NOTAS:
¹ Archivo Municipal de Hervás. Acta de pleno municipal; 11 de noviembre de 1883. CL/29, cap. 4.
² Archivo Municipal de Hervás. Acta de pleno municipal; 8 de abril de 1889. CL/30, cap. 2.
³⁻⁴ Archivo Municipal de Hervás. Acta de pleno municipal; 16 de noviembre de 1890. CL/30, cap. 4.
⁵ Archivo Municipal de Hervás. Acta de pleno municipal; 25 de enero de 1891. CL/31, cap. 1.
⁶ Archivo Municipal de Hervás. Pliego de condiciones formado por la Comisión permanente de este ilustre Ayuntamiento. Legajo 90, cap. 1.
⁷ Archivo Municipal de Hervás. Acta de pleno municipal; 28 de diciembre de 1929. CL/36.
⁸ López Calvelo, P. E. (2009): Hervás: de calles y plazas. Política, personajes y acontecimientos en la denominación de sus vías públicas. Asamblea de Extremadura, Mérida; pag. 45.
⁹ Archivo Municipal de Hervás. Proyecto de 20 Viviendas Protegidas. Pliego de condiciones. Legajo 237, cap. 2.
¹⁰ Revista de Ferias y Fiestas, Año 1954. Ayuntamiento de Hervás, pag. 64.
¹¹ López Calvelo, P. E. (2009): Hervás: de calles y plazas. Política, personajes y acontecimientos en la denominación de sus vías públicas. Asamblea de Extremadura, Mérida; pag. 56.
¹² Archivo Municipal de Hervás. Expediente sobre cesión de terreno al Patronato provincial de la Vivienda para la construcción de viviendas para funcionarios del Estado y del Ayuntamiento residentes en esta villa. Legajo 280, cap. 4.
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