viernes, 19 de agosto de 2022

EL CINE AVENIDA DE HERVÁS

EL CINE AVENIDA DE HERVÁS

Copyright © 2022 Pedro Emilio López Calvelo

En algunas entradas anteriores de este blog hemos tratado sobre algunos de los espacios de ocio de los hervasenses del siglo XX (la Sala de fiestas Villa Rosa y la discoteca La Palmera). Otros espacios de ocio interesantes son las salas de cine: el Centro de Estudios Bejaranos publicó en su número de 2021 un amplio estudio escrito por el autor de este blog sobre la construcción y los primeros años de funcionamiento del Cine-Teatro Juventud, la primera sala de cine estable que tuvo Hervás. 

La entrada actual estará dedicada al origen y la construcción de la segunda sala de cine que tuvo Hervás: el Cine Avenida, que funcionó en las décadas 60 y 70 del siglo pasado, en unos momentos en los que todos estos espacios de ocio coincidieron en el tiempo: nótese que en esos años funcionaron en Hervás dos salas de cine y dos salas de baile-discotecas (oferta de ocio completada con el Casino -Círculo La Amistad- en determinadas fechas); una amplia oferta de ocio que hacía de Hervás un lugar de referencia para el ocio del norte de la provincia -incluso del sur de la de Salamanca-, muy especialmente en la estación veraniega.

Según documentación encontrada en el Archivo Municipal de Hervás los empresarios hervasenses Francisco Nieto Mateo y Quintiliano García Gil dirigen, en mayo de 1961 un escrito al Ayuntamiento de Hervás en el que

EXPONEN: Que deseando construir un edificio en el solar de su propiedad, sito en la calle de Braulio Navas s/n, para dedicarlo a Sala de Espectáculos,

SUPLICAN: Que previo el informe correspondiente se sirva conceder el oportuno permiso, para empezar las obras del mismo, por desear tener construido el mismo para el próximo verano.

Los planos correspondientes serán presentados por el Señor Aparejador Municipal, quien está encargado de la confección del mismo.

Se tiene solicitado de la Jefatura de Obras Públicas de Cáceres el oportuno permiso de dicho organismo”.

A mediados de junio de ese mismo año, y tras el informe y proyecto del aparejador municipal, la Comisión de Policía Urbana y la Subdelegación local de la Fiscalía de la Vivienda, la Comisión Permanente de Ayuntamiento de Hervás concedió la licencia solicitada “salvo el derecho de propiedad y sin perjuicio de tercero, condicionada esta licencia a la que debe obtenerse de la Jefatura de Obras Públicas, por ser la calle Braulio Navas, a la vez, carretera del Estado; debiendo observarse la alineación que fije el Ayuntamiento, y la construcción tendrá que ajustarse a cuanto determine el Reglamento de Policía de Espectáculos públicos”.

En la memoria del proyecto presentado al Ayuntamiento se explica con detalle el edificio dedicado a sala de proyecciones cinematográficas que pretende construirse:

“El solar de emplazamiento de este edificio es de forma rectangular (34x14) […]. El acceso a la sala se hace a través de un vestíbulo-bar de 8x11 m. El bar se ha situado en el vestíbulo general para poder ser utilizado independientemente del cine; se aprovecha como terraza del mismo el espacio anterior a la fachada ya que ésta se encuentra remetida aproximadamente tres metros con relación a la línea de la calzada. Dicha terraza viene a ser como una prolongación del vestíbulo.

En este vestíbulo se encuentran los aseos de señora y caballero, taquillas y escalera de acceso al anfiteatro o entresuelo.

La comunicación con el patio de butacas se hace a través de tres puertas.

En la planta de anfiteatro o entresuelo se proyecta un vestíbulo de acceso a dicho anfiteatro a través de una puerta lateral.

El número total de localidades de este edificio-cine es de 560”.

El proyecto iba firmado por el aparejador Ángel Martínez Lanzas.




Dibujos de fachada, alzado y planta entresuelo del proyecto
firmado por el aparejador Ángel Martínez Lanzas
(Archivo Municipal de Hervás-Archivo Histórico Provincial de Cáceres)

Parece ser que las obras iban a buen ritmo cuando el Ayuntamiento de Hervás recibe, en agosto de 1961, notificación del Gobierno Civil de la provincia indicando que, tras visita del Secretario de la Junta Provincial Consultiva e Inspectora de Espectáculos públicos en la que se ha tenido conocimiento de la construcción de salón para cinematografía, deben ordenar la suspensión de los trabajos de construcción de repetido cinematógrafo, excesivamente adelantados, hasta tanto no se presente el correspondiente proyecto a examen y aprobación de dicha Junta, extremo que deberá ser notificado al propietario de dicho cinematógrafo”. En el escrito, además, se llamaba la atención al Ayuntamiento para que, en el futuro, estuviera al tanto del cumplimiento de las disposiciones emanadas por el Gobierno civil al respecto.

En el Archivo Provincial de Cáceres hemos encontrado documentación añadida: según ella, en septiembre de 1961 se está haciendo la inscripción provisional del cinematógrafo en la Delegación de Industria de Cáceres; a partir de ella sabemos que se partía de un capital inicial de 250.000 pesetas y un valor de la maquinaria de 130.000 pesetas (se especifica: un equipo de proyección sonoro, completo, marca Philips de 35 mm.; un amplificador, rectificador y elementos auxiliares para una capacidad total de 600 espectadores).

Al parecer, los propietarios enviaron rápidamente el proyecto al organismo correspondiente, pero, en septiembre, el Gobernador Civil dirige un nuevo escrito al Ayuntamiento no autorizando de nuevo la construcción de la sala de cine en tanto no se subsanen una serie de imperfecciones del proyecto que, al parecer, incumplían el Reglamento de Policía de Espectáculos, a saber: que las armaduras debían ser de hierro, que se realice una antecabina, que debía haber, como mínimo, cinco urinarios (en un W.C. para señoras y otro para caballeros) y que debía incluirse un proyecto de instalación eléctrica que, al parecer, no se había incluido en el proyecto inicial. A pesar de nuevas solicitudes hechas por los empresarios para reanudar las obras, a principios de noviembre, la Junta Provincial Consultiva e Inspectora de Espectáculos, dependiente del Gobierno Civil, volvió a denegar la autorización solicitada:

Visto el proyecto presentado solicitando la construcción de un cinematógrafo, informo con respecto a lo interesado que, teniendo en cuenta la carga dinámica del anfiteatro, su modo de actuar y anchura y no presentando datos de la estructura del mismo par jácenas de 14 ms., ni en los planos ni en la memoria, y dada su importancia, se considera preciso los datos indicados y una dirección adecuada de acuerdo con el Reglamento de Espectáculos. Igualmente se hace necesaria la ampliación de la escalera y pasos de entrada al anfiteatro”.

Los deseos de que las obras se realizaran con rapidez debieron hacer que los empresarios mandaran inmediatamente a dicha Junta un nuevo proyecto con los cambios requeridos -se renunció, expresamente a la construcción del anfiteatro previsto- de forma que el día 25 de noviembre el Gobernador Civil remitía escrito al Ayuntamiento “vistos así mismo los dictámenes del Arquitecto Municipal y de la Jefatura de Sanidad y Delegación de Industria, he tenido a bien AUTORIZAR LA CONSTRUCCIÓN de referido local en las condiciones indicadas”.

A partir de ese momento las obras continuarían con rapidez, no sin nuevos contratiempos: en febrero de 1962 el aparejador municipal comunica al Ayuntamiento que ha renunciado a la dirección de las obras el aparejador que las llevaba:  Ángel Martínez Lanzas, por lo que debían suspenderse las obras hasta el nombramiento de un nuevo director técnico.


Situación del cine Avenida

Suponemos que este último contratiempo debió superarse también con rapidez ya que, siguiendo las instrucciones emanadas por el Gobierno civil a través de la Junta Provincial Consultiva e Inspectora de Espectáculos públicos, los empresarios, al aproximarse el fin de la construcción del cinematógrafo, debieron proceder a la oportuna solicitud de apertura, que les fue concedida en el mes de agosto de 1962: “[…] he tenido a bien CONCEDERLE referida autorización, sin perjuicio del cumplimiento de cuanto dispone dicho reglamento y otros Organismos y Disposiciones”. No obstante, la Junta Provincial Consultiva e Inspectora de Espectáculos públicos hacía una advertencia al Ayuntamiento de Hervás: “[…] debiendo V.S. vigilar su cumplimiento, muy especialmente por lo que la asistencia a menores y a la hora de terminación de los espectáculos se refiere”. En esta autorización aparece por primera vez el nombre que tendrá esta sala de cine de Hervás: AVENIDA.

Con el informe favorable de la Junta Provincial Consultiva e Inspectora de Espectáculos públicos y el informe posterior del Jefe local de Sanidad de Hervás, el Ayuntamiento de Hervás corroboró la licencia de apertura, no sin recomendar el aparejador municipal que “por ornamentación de la vía pública donde se encuentra enclavado el edificio, sería conveniente el enfoscado y guarnecido y blanqueo de los muros laterales, así como el cierre de la propiedad con la vía pública, de material o cerrajería metálica”.

Para estas autorizaciones definitivas de apertura se necesitó, previamente, un certificado médico oficial, emitido por el médico de Hervás D. Emilio García Gutiérrez, en el que se acreditaba que el local construido reunía todas las condiciones higiénico-sanitarias requeridas y la autorización de la Sociedad General de Autores.

No hemos encontrado noticias de la inauguración del nuevo cine Avenida -si ésta se produjo-, que suponemos que tuvo lugar en cualquier momento a partir de finales de agosto de 1962. Tampoco hemos encontrado más información de archivo respecto de películas proyectadas, precios de entradas, etc.

El primer anuncio del cine Avenida en la Revista de Ferias y Fiestas de Hervás lo encontramos en 1963: un anuncio genérico en el que, como ocurrirá después durante muchos años, no se especificaban las películas que se proyectarían durante las Ferias y Fiestas.




Sí hemos encontrado algunos nuevos datos archivísticos del Cine Avenida referidos a 1975

En febrero de ese año el Ayuntamiento recibe una denuncia por aspectos referidos a deficiencias en la seguridad que presenta el cine y que el Ayuntamiento transmite al Gobierno Civil, desde donde se notifica que deben arreglarse los desperfectos que indique el informe técnico de un aparejador para prevenir posibles siniestros o accidentes, haciendo saber, además, que, de no repararse con rapidez estas deficiencias, podría decretarse el cierre del cinematógrafo, cierre preventivo que llevó a cabo el Ayuntamiento de Hervás en tanto no se reparasen los desperfectos. 

Pocos días después, un informe emitido por el Colegio Oficial de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Cáceres con fecha de 28 de febrero de 1975 indicaba los siguientes desperfectos: “El mencionado local tiene un falso techo de escayola. Las placas de escayola están sujetas a unos maderos que a su vez se sujetan de las cerchas metálicas que sustentan la cubierta. Los mencionados maderos habían flechado; es por esta causa que habían aparecido unas grietas en el mencionado falso techo. En la actualidad se han puesto maderos nuevos, secos, que se han sujetado a las placas y resto de maderos, con lo que ha desaparecido la flecha del techo”. 

Una vez reparados los desperfectos, tras las correspondientes autorizaciones, el cine Avenida volvió a funcionar con normalidad. Ya no hemos encontrados más datos en archivos referidos al funcionamiento de esta sala de cine -tampoco datos referidos a su cierre y clausura en los años 80-.


Única fotografía que hemos encontrado del cine Avenida
Fuente: Facebook Hervasenses

Sólo a partir del número de la revista de 1978 aparecen las películas programadas por el cine Avenida durante las Ferias y Fiestas de ese año:


Y a partir de 1979 debió producirse algún cambio en la gestión del cine (o en la idea de gestionarlo por los propietarios) ya que en ese año la gestión del cine Avenida aparece conjunta con la del cine de verano Villa-Rosa, tal como se puede apreciar en la Revista de Ferias y Fiestas de ese año.


En la revista de 1980 apareció el último anuncio del cine Avenida (en conjunto con el de Villa Rosa) en la revista de Ferias y Fiestas -con una estética netamente diferente de las anteriores-: debemos suponer, por tanto, que el cierre del cine debió producirse entre 1980 y 1981.



En total, casi dos décadas de funcionamiento del cine Avenida, siempre en competencia con el antiguo cine Juventud, inaugurado en 1942.

Pero durante este largo tiempo el cine Avenida no sólo funcionó como sala de cine, si no que, también, fue el local en el que se desarrollaron diferentes actos de la vida local, de carácter social o cultural, de carácter político, etc., tal como hemos podido apreciar en distintos medios de prensa consultados.

Algunos ejemplos: en 1975, el cine Avenida fue el escenario del acto multitudinario del homenaje al escultor, hijo predilecto de Hervás, Enrique Pérez Comendador, en el que se le impusieron las insignias de la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio -ya dedicamos una entrada en este blog a los actos de homenaje a Pérez Comendador en Hervás-.


Revista de Ferias y Fiestas, 1975

El cine Avenida fue también el sitio de celebración de mítines políticos durante la Transición: elecciones, mítines por el referéndum para aprobar la Constitución..., de partidos de todo el espectro político del momento, tal como podemos apreciar en estos recortes del periódico HOY:





El desarrollo de la televisión en color, la aparición progresiva de los aparatos de vídeos, ..., la evolución, en fin, de las formas de vida con nuevas formas de entretenimiento y diversión fueron llevando a las salas de cine a una situación económica difícil y muchos, como es el caso de nuestro cine Avenida, no pudieron sobrevivir y acabaron cerrando.

El solar que, durante dos décadas, cobijó al cine Avenida fue pasto, de nuevo, del desarrollo económico y los cambios de forma de vida de los años 80 y, en unos momentos en los que se estaba produciendo una importante renovación inmobiliaria en la zona de Braulio Navas, vio levantarse un bloque de viviendas que aún hoy subsiste.


Solar y edificio que ocupa el lugar donde estuvo el cine Avenida 
(fotografía finales años 80)

Hasta aquí esta breve aportación sobre la historia del cine Avenida de Hervás a la luz de los documentos que hemos podido encontrar para documentarla. Importante valorar el esfuerzo individual -económico y profesional- de estos empresarios que fueron promotores y gestores de esta sala de cine y que significó un complemento importante para el desarrollo de actividades culturales en el pueblo: 2 salas de cine para un municipio de menos de 4000 habitantes. 

Como dijimos, en las décadas de los 60 y 70 pasadas Hervás tuvo un importante proceso de modernización y de desarrollo económico (desarrollo de la industria de la madera, inicios de un incipiente turismo), y esa modernización se tradujo en un crecimiento inmobiliario, pero también en la aparición de salas de baile, cines, bares y pubs;... Como ya indicamos, Hervás fue, en aquellos momentos, un importante referente de ocio en el norte de Extremadura.

NOTA TARDÍA: Añadimos un par de fotografías que la familia Nieto-Vizcaino ha tenido la amabilidad de facilitarnos del momento en que se estaba produciendo el derribo del cine Avenida, como dijimos, a principios de los años 80. Gracias por las fotos.




NOTA: El texto de esta entrada en el blog TRASUNTOS DE HERVÁS no ha sido nunca publicado. La propiedad intelectual de dicho texto pertenece, por tanto, al autor del blog (Pedro-Emilio López Calvelo).
La reproducción total o parcial de este texto en alguna publicación o cartel deberá hacer constar con claridad su autoría, así como la referencia de la publicación en que hubiera sido previamente difundida por su autor. Su uso comercial queda supeditado a la expresa autorización del autor. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

PLACAS DE SEGURO CONTRA INCENCIO EN LOS EDIFICIOS DE HERVÁS

PLACAS DE SEGURO CONTRA INCENCIO EN LOS EDIFICIOS DE HERVÁS Copyright@2024PedroEmilioLópezCalvelo A quien "alimenta" este blog le ...